El Papa Francisco bendijo hoy una campana conocida como “La voz de los no nacidos”, que fue donada por la Fundación “Sí a la Vida” y que en esta ocasión será trasladada a Kazajstán.
Antes de que diera comienzo la Audiencia General de este 15 de mayo, el Santo Padre bendijo y también hizo repicar esta imponente campana dorada de una tonelada de peso.
Desde hace cinco años, se envía a un lugar distinto del mundo para concienciar sobre la crueldad del aborto, portando el mensaje de que toda vida es sagrada y e inviolable.