21 de noviembre de 2025

Este miércoles 19, en un emotivo acto en la capilla de San Pedro Pescador, tres hermanos en la fe recibieron la Confirmación y la Primera Comunión, en una jornada marcada por la alegría, la fe y el compromiso de llevar el Evangelio hasta los confines de la tierra. 

El pasado 19 de noviembre, Puerto Toro, la localidad más austral del continente americano, fue escenario de un acontecimiento que quedará grabado en la historia de nuestra comunidad y de la diócesis. En una celebración sin precedentes, tres hermanos en la fe —José Catrin, reconocido líder y habitante de la zona; Pablo Monroy, funcionario de Carabineros de Chile asignado al histórico retén de Puerto Toro; e Iván Bustos, profesor y director de la escuela local— recibieron los sacramentos de la Confirmación en la capilla de San Pedro Pescador. Además, Iván Bustos tuvo la alegría de recibir por primera vez la Sagrada Comunión, fortaleciendo su caminar espiritual y su compromiso con Cristo.
La jornada comenzó en la mañana, cuando el obispo, acompañado del párroco, pbro. Miguel Bahamonde, junto a las hermanas religiosas del Instituto de las Misioneras Siervas del Divino Espíritu, hermana Leidy y hermana Cristina, emprendieron un traslado en lancha institucional, facilitada por Carabineros, desde Puerto Williams. A pesar de las condiciones climáticas adversas, con aguas heladas y cubiertas de nieve, la fe, la esperanza y la alegría llenaron los corazones de quienes participaron en este momento histórico para la comunidad.
Desde la parroquia, expresamos nuestra profunda gratitud a Dios por esta manifestación de fe y por la valentía de estos hermanos, que incluso en los rincones más remotos hacen suyo el Evangelio. Este acontecimiento refuerza nuestro compromiso de seguir llevando la buena noticia hasta los confines de la tierra y de apoyar a quienes dedican sus vidas al servicio misionero.
Que esta celebración sirva de inspiración para toda nuestra comunidad a fortalecer su fe y a colaborar activamente en la misión evangelizadora, llevando la luz de Cristo a todos los rincones, por remotos que sean. Este acto de fe nos motiva a seguir caminando juntos, con esperanza y determinación, hacia un mundo más lleno de amor y esperanza.

Fuente: Departamento de Comunicaciones Diócesis de Punta Arenas