19 de agosto de 2025
No se registran avances en las conversaciones en Doha (Qatar) que debían culminar en un acuerdo ayer, 18 de agosto, entre el gobierno de la República Democrática del Congo y el grupo guerrillero M23/Alianza del Río Congo (AFC). Los representantes de la guerrilla no se presentaron a la mesa de negociaciones alegando que las disposiciones de la declaración de principios firmada en Doha el 19 de julio no se habían implementado plenamente (ver Fides 21/7/2025).
Qatar, que media entre ambas partes, ha asegurado que las conversaciones continuarán. “Aunque no se cumplió la fecha límite del 18 de agosto, ambas partes respondieron positivamente al facilitador y expresaron su disposición a proseguir con las negociaciones”, ha declarado un representante del gobierno qatarí. El punto que ha bloqueado la firma del acuerdo es la liberación de cientos de detenidos por parte de las autoridades de Kinshasa y que el M23/AFC considera prioritaria. La liberación de prisioneros es una de las medidas “para impulsar la confianza” previstas en la declaración de principios del 19 de julio. Sin embargo, el gobierno congoleño se ha negado a cumplir con esta disposición hasta que se firme el acuerdo final.
El borrador del acuerdo, cuya firma estaba prevista para ayer, contempla una resolución del conflicto en tres fases con una duración prevista de al menos siete meses a partir de la fecha del acuerdo. La primera fase establece la formación, bajo la autoridad del Ministerio del Interior, de “una fuerza especial provisional” compuesta en un 50% por miembros rebeldes “aptos”, encargada de colaborar con la policía y el ejército nacional. Su ámbito de intervención se limitaría a las zonas actualmente bajo control del M23 en las provincias de Kivu del Norte y Kivu del Sur, donde sería la única fuerza autorizada para intervenir. Al finalizar su mandato (cinco años renovables), sus miembros se integrarían en el ejército y la policía.
El acuerdo también establece el retorno de la autoridad del Estado a estas zonas. El gobierno congoleño nombraría autoridades provisionales a nivel local, sin excluir a los posibles candidatos sugeridos por la AFC/M23. El mandato provisional de estas autoridades de transición finalizaría con la organización de elecciones en la zona, previstas para 2027. Simultáneamente, el acuerdo propuesto prevé la organización de una mesa de diálogo nacional en 2026. Solicitado unánimemente por la oposición congoleña, este proyecto, apoyado durante varios meses por la Conferencia Episcopal Nacional del Congo (CENCO) y la Iglesia de Cristo en el Congo (ver Fides 4/2/2025 y 13/2/2025), ha encontrado varias dificultades para despegar. Finalmente, se prevé un Mecanismo de Monitoreo Multilateral cogestionado por la RDC y el M23 y con la participación como observadores de Qatar y la Unión Africana (UA) para garantizar la implementación del acuerdo.