Los sacerdotes en la Catedral de San Patricio en Nueva York (Estados Unidos) se sorprendieron por la “irreverencia y falta de respeto” que ocurrió durante el reciente funeral de un activista trans, indicó el Cardenal Timothy Dolan en sus primeros comentarios públicos al respecto. “No conocíamos el trasfondo. No hacemos controles del FBI sobre las personas que quieren ser enterradas”, señaló el Arzobispo de Nueva York durante su podcast del martes 20 de febrero, y agregó que el personal de la catedral intenta ser acogedor cuando alguien solicita un funeral. La catedral acogió el servicio fúnebre del 15 de febrero para Cecilia Gentili, un activista que ayudó a despenalizar el trabajo sexual en Nueva York y que promovió que la “identidad de género” se añadiera como una clase protegida en las leyes de derechos humanos del estado.
23 de febrero de 2024
“Aplaudo a nuestros sacerdotes que tomaron una rápida decisión: ‘Con un comportamiento como este, no podemos celebrar una Misa. Haremos la Liturgia de la Palabra, que son las lecturas, el sermón y las oraciones de petición y el Padre Nuestro, y luego lo detendremos. La Misa no continuará’”, sostuvo Dolan. El sábado 17 de febrero, el P. Enrique Salvo, rector de la Catedral de Nueva York, indicó en un comunicado publicado en el sitio web de la Arquidiócesis de Nueva York que las autoridades de la Iglesia compartían la “indignación por el comportamiento escandaloso en un funeral aquí en la Catedral de San Patricio”. En la catedral, indicó, sólo se sabía “que la familia y amigos estaban solicitando una Misa fúnebre” para una persona católica, y no sabían “que nuestra acogida y oración serían degradadas de una manera tan sacrílega y engañosa”.
Traducido y adaptado por ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA.